
ensayo de mezcla
Una prueba de mezcla puede tener diferentes objetivos. Uno de ellos es, por ejemplo, determinar las calidades de mezcla que se pueden alcanzar en principio con diferentes sistemas de mezcla. Para ello se utiliza una fórmula de referencia definida. Esto permite realizar análisis reproducibles y comparables. El objetivo es comparar de forma objetiva diferentes principios de mezcla.
Las investigaciones pueden ampliarse sistemáticamente. Por ejemplo, se puede variar el grado de llenado. Lo mismo se aplica a la frecuencia de rotación y al tiempo de mezcla. También se puede modificar el grado de humedad del material mezclado. Además, se tienen en cuenta el desgaste de las partículas, la tendencia a la separación y los grados de vaciado residual alcanzables. Para este tipo de series de ensayos se debe disponer de varias mezcladoras de diferentes fabricantes con un tamaño de lote comparable.
En la práctica, el usuario suele realizar una preselección. El objetivo es limitar el número de ensayos necesarios. Los ensayos de mezcla se suelen realizar en el centro técnico del fabricante correspondiente. Para ello se preparan varias recetas exigentes. Es recomendable realizar varios ensayos por receta. De este modo se pueden comparar diferentes modos de funcionamiento.
En primer lugar, se aplica el modo de funcionamiento habitual del usuario. A continuación, se realiza una prueba según las recomendaciones del fabricante de la mezcladora. Otro enfoque sirve para optimizar o confirmar. De esta manera se pueden llevar a cabo optimizaciones. Además, se puede evaluar la solidez del proceso.
En algunos casos, el fabricante de mezcladoras puede ofrecer varias soluciones que parecen ideales. Esto es posible, en particular, en los ensayos realizados en amixon GmbH. Allí se dispone de más de 30 mezcladoras de prueba. En total hay 6 tipos diferentes. Dependiendo de la tarea, se pueden identificar una o dos soluciones adecuadas. Los ensayos muestran rápidamente qué tipo de mezcladora prefiere el usuario.
La evaluación de los resultados se realiza en función de numerosos criterios. A menudo, el fabricante de la máquina no conoce estos criterios en detalle. Además de la calidad de la mezcla, se evalúa la capacidad de vaciado completo y la idoneidad para la limpieza en seco. La facilidad de limpieza mediante procesos húmedos también desempeña un papel importante. Los modernos sistemas de limpieza en húmedo, como los limpiadores de chorro programables, permiten tiempos de limpieza cortos con un bajo consumo de agua. Todos estos aspectos forman parte de una prueba de mezcla completa.
Algunos productos mezclados son especialmente delicados. El muesli es un ejemplo de ello. En tales casos, es aconsejable realizar al menos una prueba en un mezclador a gran escala. Si la producción posterior va a comprender lotes de aproximadamente 3 m³, se debe realizar al menos una prueba en un mezclador con un volumen útil de 2 o 3 m³.
En la decisión también se tienen en cuenta aspectos económicos y ergonómicos. Entre ellos se incluyen el precio de inversión, los costes de mantenimiento y el espacio necesario. La integración en los procesos de producción existentes también es relevante. Dado que la vida útil de una mezcladora amixon® es de más de 30 años, la planificación de la instalación reviste una importancia especial. Amixon puede registrar digitalmente la situación de instalación en las instalaciones del cliente. Sobre esta base, se pueden crear variantes de diseño tridimensionales. De este modo, se pueden simular los flujos de material y los procesos de trabajo. El resultado es un plano de diseño fiable que sirve de base para la decisión de inversión.